sábado, 21 de julio de 2012

Dudas, sentimientos encontrados. Y toda esa incertidumbre que rodea a un "Puede ser".

domingo, 1 de julio de 2012

It's summertime!



Y vuelvo para irme otra vez, esta vez por menos tiempo. Aunque quién sabe, acabo de descubrir que desde el móvil también se puede publicar, así que probablemente me tengáis por aquí antes de lo previsto.

Porque sí, hoy mismo me voy a la playa, estoy ya de camino, de hecho. No me hago aun a la idea, hace menos de una semana me ahogaba entre tanto apunte y ahora voy a poder hacerlo de verdad entre aguadillas en el mar y la piscina.

Y pensar que mañana a estas horas estaré con toalla en mano, gafas de sol y luciendo aun moreno flexo mientras jugamos alguna que otra partida de cartas, ¡No os imagináis las ganas que tengo!

Espero que vuestro verano haya empezado con el mismo buen pie, y si no lo ha hecho ánimo, ¡que ya está a la vuelta de la esquina!

Nos leemos pronto ;)

Donna.

Ciclos



Sentada en la cocina, libro en mano, removía con parsimonia una taza de café. Movimientos mecánicos, mirada ausente. Sus ojos hacía tiempo que habían pasado de seguir el recto camino de las líneas a contemplar ensimismados las ondas en la superficie de la taza. Un círculo perfecto, a ritmo de cuchara.

"Un círculo perfecto. Un ciclo que se repite una vez, y otra, y otra..." Su cabeza comenzó a vagar, recordando acontecimientos de ese año y de los pasados. Al fin y al cabo todo quedaba reducido a eso, ¿no? Un ciclo tras otro, empiezan, acaban, se juntan, se enredan, algunos se continúan sin que ni siquiera te des cuenta. Tan normal, tan simple. Acaba el colegio, llega la universidad. Sales de ahí y te ves trabajando, nueva casa, nueva vida, puede que pareja, hijos. Pero para qué ir tan lejos. Para ejemplos el de su vida en aquel momento. Un curso acaba, comienza el verano. Con él la que será de aquí en adelante su carrera. Con el verano llegan las vacaciones, con ellas la playa. Luego vuelta a empezar. Todo superpuesto, perfectamente cuadrado, sigue así su cauce. Incluso esas cosas que quedan atrás y siguen la corriente escurriéndose entre nuestros dedos. Aún la invadía cierta nostalgia al pensar que en justamente un mes aquel ciclo llegaría a su fin. A partir de entonces el tiempo comenzaría a contarse en años. Sí, en esa tan fea palabra a veces, años. Así como en apenas diez días podía tener lugar algo extraordinario. A la vez que era posible que no ocurriera nada. A pesar de todo y visto lo visto no estamos tan condicionados, después de todo. No todo es una rutina en la que podamos predecir el siguiente acontecimiento. En muchos casos sí, es cierto, ¿pero no es suficientemente interesante la vida como para que sintamos ganas de vivirla?

"A veces parece ser que no", pensó con sarcasmo. "O a veces demasiado..." Esto último con una pizca de amargura. Soltó la cuchara y dio un sorbo a su café, lo que acentuó el amargo sabor de sus pensamientos. Instantes después sus ojos se encontraban sumergidos de nuevo entre letras, como si aquella breve interrupción no se hubiera producido.

Y es que hay veces en las que es mejor no detenerse a pensar.